Hoy se celebra un triste aniversario. Se cumplen dos años de la desaparición del MH370, el vuelo de Malaysia Airlines que desapareció de los radares cuarenta minutos después su despegue en Kuala Lumpur camino de Pekín.

Detalle de los restos localizados en Mozambique. Fuente ATSB. Imagen de Blaine Gibson
Con motivo de este aniversario, Malasia ha publicado el segundo informe con los avances en la investigación. Uno de los datos más relevantes es la confirmación oficial de que los restos localizados en julio en la isla de Reunion pertenecen al MH370. Lejos de resolverse las dudas existentes, siguen quedando en el aire muchas cuestiones que será difícil aclarar. La búsqueda sigue, liderada por Australia con un despliegue de medios y tecnología sin precedentes.
¿Cómo evitar que vuelva a suceder?
Coincidiendo con este segundo aniversario, la Organización de Aviación Civil Internacional ha movido ficha. Ayer anunciaba tres importantes medidas que se incorporarán al Anexo 6 del Convenio de Chicago. Su objetivo es mejorar la localización permanente de aeronaves y la recuperación de datos de las cajas negras. Se exigirán tres nuevos requisitos en aeronaves comerciales:
- Incorporación de dispositivos de localización autónomos que puedan transmitir la ubicación de la aeronave al menos una vez por minuto en situaciones de emergencia.
- Incorporación de medios que permitan recuperar y disponer los datos del registrador de vuelo en cuanto sea necesario.
- Ampliar la grabación de las voces de cabina a 25 horas para cubrir todas las fases del vuelo en cualquier tipo de operación.
Estas medidas se harán efectivas de aquí a 2021, dado que requieren la adaptación de las aeronaves y cambios en la tecnología a bordo.
Las víctimas
El mayor drama del MH370 vuelve a ser el de las familias de las 239 personas a bordo (227 pasajeros y doce tripulantes). A la incertidumbre de no saber qué paso con sus familiares, se une la demanda interpuesta contra la aerolínea y su empeño para que la búsqueda de la aeronave continúe con la esperanza de dar respuesta a tantas preguntas.
Pilar Vera, presidenta de la Federación Internacional de Víctimas de accidentes aéreos y familias, ponía en Radio 5 (RNE) recientemente a estas familias como ejemplo de lucha frente a las “dificultades no ya para hablar con las autoridades, sino incluso para manifestarse en contra del olvido, pidiendo un informe que les explique o que se siga buscando al avión”. Esa lucha es, sin duda, la cara más descorazonadora de uno de los mayores misterios de la aviación de nuestros días.