Aunque viajar en avión es hoy más frecuente que nunca y es el medio de transporte más seguro (ya sabemos que de tanto repetirlo puede sonar a tópico, pero es cierto), muchas personas sienten inquietud cada vez que se suben en un avión.
Posiblemente el origen de esa sensación procede del desconocimiento sobre el funcionamiento de la aeronave o los procedimientos que seguimos los pilotos en las diferentes fases del vuelo. Así que te contamos algunos detalles que quizás te ayuden.
Los ruidos del avión son la principal fuente de preocupación para muchos pasajeros, aunque si afináis el oído en los próximos vuelos veréis que siempre son similares y totalmente normales. Dos son los más perceptibles. El primero, procede del inferior de la aeronave, bajo nuestros pies. Es el tren de aterrizaje subiendo o bajando, en función de la fase del vuelo en la que nos encontremos. Para los que no estéis familiarizados, son las ruedas, amortiguadores y sistemas que permiten al avión tomar tierra y desplazarse por esa superficie.
El segundo está cerca de los planos del avión (más conocidos como alas). Se producen por los flaps (sistemas que ayudan a la sustentación de la aeronave) o los aerofrenos (contribuyen a reducir la velocidad del avión). Así que si escuchas estos sonidos, no te asustes, todo está dentro de la normalidad.
Los bandazos durante el vuelo son también habituales. En la atmósfera el viento manda, pero los aviones están perfectamente preparados para operar con normalidad en ese entorno. Recuerda que en el caso de que se produzcan turbulencias, la tripulación avisará a los pasajeros para que se tomen las medidas que garanticen la seguridad.
Las condiciones meteorológicas adversas son otra de las preocupaciones de los pasajeros. Para tranquilizarte, recuerda que la tecnología hoy permite la operación en condiciones de poca visibilidad por niebla, por ejemplo. En cualquier caso, las tripulaciones conocen perfectamente el comportamiento de la aeronave en distintas situaciones, están formados para afrontar diferentes escenarios y valoran la posibilidad de llevar a cabo la operación con todas las garantías de seguridad. El Comandante como máximo responsable de la aeronave, la carga y las personas a bordo tomará la decisión de continuar con el vuelo o desviarlo si lo considerase necesario.
Estas son unas simples curiosidades que esperamos que te ayuden a entender un poco mejor las operaciones aéreas. Por supuesto, si tus miedos van más allá es importante que te pongas en manos de profesionales que puedan ayudarte a enfrentarlo. ¡Felices vuelos!